
Alejandro Abeijón
La sostenibilidad en el sector inmobiliario ya no es un mensaje de nicho...
La sostenibilidad en el sector inmobiliario ha dejado de ser un mensaje de nicho y ha evolucionado hacia un imperativo estratégico que abarca todos los niveles de desarrollo y promoción de propiedades.
Hoy en día, los consumidores y los inversores están cada vez más conscientes de la importancia de construir y vivir en entornos que respeten el medio ambiente, lo que ha llevado a los promotores a renovar su imagen e integrar la sostenibilidad como un componente esencial de su marca corporativa. Para ilustrar este cambio significativo en la industria, considera uno de estos dos proyectos emblemáticos como ejemplos destacados:
Villa Noon, España: Este innovador proyecto fue diseñado y promocionado por Fran Silvestre Arquitectos y se presenta como la primera villa de lujo del mundo que opera con cero emisiones. La propuesta de Villa Noon no solo se centra en la estética y el lujo, sino que también incorpora tecnologías avanzadas que permiten la autosuficiencia energética y la utilización de recursos naturales de manera eficiente. El atractivo de Villa Noon se ha visto potenciado por su ubicación privilegiada en un entorno natural, lo que ha atraído a personas con un alto nivel patrimonial que valoran no solo el confort y el lujo, sino también la sostenibilidad y la responsabilidad ambiental.
Broome SoHo, EE. UU.: Este impresionante condominio de lujo de 30 plantas, diseñado por el prestigioso Renzo Piano Building Workshop, ha sido promocionado con un enfoque claro en la certificación ecológica. Desde su concepción, el proyecto se ha alineado con los estándares más altos de sostenibilidad, buscando no solo cumplir con los requisitos de certificación, sino superarlos. La integración de prácticas de construcción sostenible, el uso de materiales reciclables y la implementación de tecnologías verdes han sido fundamentales para su desarrollo.
Al considerar la certificación ecológica para cualquier proyecto inmobiliario, es fundamental buscar la calificación más alta que sea posible alcanzar. Esta estrategia no solo mejora la percepción del proyecto en el mercado, sino que también puede incrementar significativamente el valor de la propiedad.
Estudios realizados por el Consejo Mundial de la Construcción Ecológica han demostrado que propiedades que cuentan con estándares de calificación como LEED y Green Star pueden venderse hasta un 30% más caras en comparación con edificios que no poseen dicha certificación. Este aumento en el valor es un testimonio del creciente interés y demanda por espacios que no solo sean funcionales, sino que también estén alineados con los principios de sostenibilidad y responsabilidad ambiental.
Por lo tanto, invertir en certificaciones ecológicas no solo es una decisión ética, sino también una estrategia financiera inteligente en el mercado inmobiliario actual.